Hoy estamos de celebración.
En el año 2011 comenzó la colaboración de Pedro Ferrer Fotógrafo Interiores como fotógrafo oficial para todos los anfitriones de Airbnb en Cantabria.
En estos diez años he tenido la oportunidad de realizar más de doscientos reportajes fotográficos en todo el territorio cántabro para Airbnb.
Desde Unquera hasta Torrelavega, desde Reinosa hasta Mogro, en ciudades y pueblos, urbanas y rurales, de costa y de montaña, cientos de particulares y empresas cuentan, gracias al modelo de negocio de Airbnb, con una imagen profesional y atractiva de sus alojamientos vacacionales.
El impacto de las imágenes profesionales en AirBnb
Todos los anfitriones de Airbnb con los que he tenido el placer de trabajar, me transmiten siempre su satisfacción al comprobar como, tras subir las nuevas fotos a la plataforma, el contador de visitas a su página crece exponencialmente.

Laura, propietaria de un coqueto loft en el Río de La Pila, me comentaba «Pedro, hasta que puse tus fotos recibía unas 40 visitas a la semana en mi anuncio. Desde que están las nuevas fotos he pasado a tener más de 400 visitas al día, es una pasada». Y claro, más visitas supone más alquileres.
Jesús, que realizó una fantástica reforma de un entresuelo muy cerca del Palacio de Festivales con vistas a la bahía, me decía «antes, los huéspedes comentaban que las fotos del anuncio no hacían justicia a la vivienda. Desde que tengo tus fotos, los comentarios han cambiado por completo. Ahora me dicen que las fotos se ajustan fielmente a la realidad, y lo agradecen.»
Aumenta tus reservas con fotografías de calidad
Según las estadísticas que maneja Airbnb, contratando un servicio de fotografía profesional de interiores los anfitriones aumentan sus ingresos un 20%. Un anuncio con fotografías de calidad permite al anfitrión aumentar sus tarifas. Las fotografías son la tercera razón que decide a un huésped a elegir un alojamiento, por detrás de la ubicación y el precio. Esas fotos se pagan solas, recuperándose la inversión con la primera noche.
Actualmente existen más de dos mil alojamientos listados en Airbnb para el territorio de Cantabria.
Si tu vivienda consigue aparecer en una de las búsquedas cumpliendo los criterios de ubicación, número de camas, fecha disponible y precio de alquiler, tan sólo dispondrás de unos pocos segundos para conseguir que tu potencial cliente complete una reserva.
Con unas fotos profesionales dispondrás de una ventaja. Si ofreces fotos oscuras, desenfocadas, capturadas con teléfono móvil o cámaras de gama baja, tu anuncio pasará desapercibido a la vista de tu potencial cliente, que inevitablemente se verá atraído por aquellas fotografías realizadas por un profesional con cámaras de altas prestaciones, imágenes luminosas, con encuadres atractivos, nítidas y sugerentes.
Airbnb lo sabe, y por ello ofrece a sus anfitriones el servicio de fotografía profesional. Por un lado sus clientes van a obtener un beneficio económico por el aumento de alquileres, y por otro, la empresa californiana consigue una imagen uniforme en la mayoría de sus viviendas listadas, con una página estéticamente más atractiva que destaca por su diseño respecto a los portales de sus competidores.
Una buena parte de los reportajes fotográficos de estos últimos diez años los he realizado en la ciudad de Santander. El reclamo turístico de la capital cántabra es innegable. Más de trescientos apartamentos turísticos extrahoteleros en Santander ofrecen ahora mismo (y estamos en temporada baja) estancias vacacionales a través de la plataforma de Airbnb. En estos años, he tenido la oportunidad de fotografiar viviendas de todo tipo, desde habitaciones privadas en pequeños pisos con baño y cocina compartida, hasta lujosos chalets individuales o pisos en primera línea de playa, la oferta de Airbnb es variada y muy atractiva.
Saliendo de Santander, hay varios núcleos de la región cántabra que concentran la mayoría de alojamientos en el catálogo de Airbnb.
La atracción por los deportes náuticos y especialmente el surf tiene un tirón tremendo en los meses de verano a lo largo de toda la costa cántabra. He tenido la oportunidad de fotografiar gran cantidad de alojamientos dedicados exclusivamente al mundo del surf. Academias, escuelas y surf camps ofrecen alojamiento + formación en localidades como San Vicente de La Barquera, Suances, Liencres y sobre todo, el municipio de Ribamontán al Mar, con Somo, Langre y Loredo como puntos calientes del turismo surfero más importante del norte de España.
En la costa occidental, con sus villas marineras de Suances, Comillas y San Vicente de La Barquera, he realizado reportajes de típicos apartamentos de playa, lugares de descanso para unas vacaciones en familia disfrutando del mar cantábrico.
En el interior de la región el número de viviendas de Airbnb no es tan abundante como Santander y la franja costera pero, aunque más dispersas, existe una buena oferta de cabañas pasiegas, casonas montañesas, posadas y apartamentos rústicos de todo tipo, desde Liébana hasta Alto Campoo, desde Liérganes hasta Barcena Mayor. En estos diez años trabajando con Airbnb he podido fotografiar un buen número de casas con chimenea, piedra de sillería, vigas de madera de roble, cocina de leña y el verde de bosques praderas y montañas llenándolo todo. Lugares acogedores en entornos naturales de gran belleza.
La costa oriental, con los referentes de Noja, Santoña, Laredo y Castro Urdiales los cubre un compañero del país vasco. Airbnb dispone de una amplia red de freelance distribuidos por todo el mundo, de modo que siempre tengas un fotógrafo profesional cerca de tí.